14 de junio de 2007

Boca goleó a Gremio y espera tranquilo la revancha

Fue un 3 a 0 perfecto en favor de Boca y pudo ser más abultada la ventaja, pero también pudo haber sido más exigua la diferencia contra Gremio. Lo cierto es que el conjunto de Miguel Ángel Russo disputó un partido sumamente complicado y supo salir airoso de éste con una contundente victoria que lo deja bastante sereno de cara al partido de vuelta de esta final de la Libertadores en Porto Alegre.
“Un partido bien copero” sería la síntesis de este choque por la primera final entre Boca y Gremio
. Y el estruendoso ingreso del conjunto local al terreno de juego puso en evidencia dicha situación. El público sabía que su equipo se jugaba parte del semestre en este choque, puesto que las ilusiones de obtener el campeonato local habían quedado desechadas días atrás, y así se lo hizo saber a los jugadores.
En lo estrictamente deportivo vale destacar la meritoria actuación de Gremio, principalmente en la primera mitad, ya que sin mostrar un volumen de juego atractivo controló bien el mediocampo del conjunto argentino, presionando en la salida, y supo ponerle la debida atención a la mayor virtud de este Boca: Juan Román Riquelme. El “10” tuvo poca participación en esos primeros minutos y no pudo desplegar el fútbol que venía ejecutando en los anteriores duelos. Pese a eso, se las ingenió para ofrecerle su aporte al equipo mediante un tiro libre para Palermo, quien pifió el remate contra el arco custodiado por Saja y éste quedo a merced del botín izquierdo de Rodrigo Palacio. El delantero no perdonó los errores defensivos de los brasileros y estampó la ventaja a favor de Boca cuando transcurrían 18 minutos de la etapa inicial.
Perecía que ese tanto abriría el partido para los locales, pero fue todo lo contrario. Gremio siguió luchando cada balón como si fuera el último y arremetiendo peligro contra Mauricio Caranta, aunque sin obtener resultados positivos que se correspondieran con esas aproximaciones.
Así se fueron los primeros 45 minutos. Con la rara sensación de que Boca tenía todo para aumentar diferencias pero carecía de ideas y que Gremio, basándose en rendimientos individuales, podía lograr la ansiada igualdad.
Pero, por fortuna, el inicio del complemento trajo una sucesión de hechos que levantaron el tono del encuentro, en especial para el cuadro argentino. Primero con una excelente jugada colectiva entre Clemente Rodríguez y Neri Cardozo que definió Palacio ante la salida de Saja y un defensor brasileño salvó providencialmente en la línea. Y luego llegaría la expulsión de Sandro Goiano a los 13 minutos, por una tremenda patada contra la humanidad de Ever Banega, que atentaría definitivamente contra los intereses ofensivos del conjunto de Porto Alegre, relegándolo únicamente a sostener la mínima diferencia en contra.
A partir de allí, Boca fue empujando lentamente contra la valla de Saja y acorralando a los mediocampistas brasileños contra su propia área, aunque sin crear chances netas de gol, lo que intranquilizaba al público local. Pero volvió a aparecer Román, a quien le cometieron una infracción en el borde del área grande, reclamó derecho de autor y, luego de un toque de Claudio Morel Rodríguez, decretó el segundo gol para Boca a los 27 y una ventaja que era vista con mejores ojos hasta por el propio entrenador.
Todo marchaba sobre ruedas para este conjunto de Boca hasta que, contrariamente a lo que se esperaba, comenzó a mermar en su rendimiento. Ni el ingreso de Jesús Dátolo parecía ser una inyección anímica para los jugadores. Pero cuando el duelo se moría Boca dio la estocada final, la que podría significar la obtención de una nueva Libertadores. Riquelme produjo una jugada magistral desparramado rivales en una baldosa, sacó un potente remate que atajó Saja, pero luego de ese despeje llegó el centro de Palermo para que Ledesma cabeceara desprolijamente el balón y, rebote incluido en Patricio, ingresara mansamente en la valla de Gremio.
Ya no había tiempo para más, sólo para el pitazo final. Y la euforia del público y de los jugadores que comprendían el gigantesco paso que habían dado hacia la sexta Copa Libertadores de América para Boca. Pero esa ya es una historia que deberá cerrarse dentro de una semana en suelo brasilero, donde el conjunto de Russo deberá ofrecer otro místico partido para escribir su propio final feliz.

Síntesis

BOCA: Mauricio Caranta; Hugo Ibarra, Daniel Díaz, Morel Rodríguez, Clemente Rodríguez; Pablo Ledesma, Ever Banega, Neri Cardozo; Riquelme; Rodrigo Palacio y Martín Palermo.
GREMIO: Sebastián Saja; Patricio, William, Teco, Lucio; Sandro Goiano, Diego Gavilan, Diego Souza, Carlos Eduardo; Tcheco y Tuta.
Goles: 18'PT Rodrigo Palacio (BJ), 27'ST Juan R. Riquelme (BJ), 44'ST Pablo M. Ledesma (BJ)Cambios: 22'ST Jesús Dátolo por Neri Cardozo, 27'ST Lucas por Tuta, 35'ST Douglas por Tcheco, 36'ST Sebastián Battaglia por Ever Banega
Amonestados: 12'PT Hugo B. Ibarra (BJ) , 15'PT Patrício (Gr) , 33'PT Ever Banega (BJ) , 9'ST Sandro Goiano (Gr) , 9'ST Juan R. Riquelme (BJ) , 18'ST Neri Cardozo (BJ)
Expulsados: 13'ST Sandro Goiano (Gr)
Estadio: Bombonera (Boca Juniors)

Gabriel Antonielli

Foto: http://www.ole.com.ar/

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy bueno, explica con lujo de detalles todo lo que ví en el partido. Mu gustó mucho. Espero que se repita y que puedas escribir otra nota sobre la victoria de Boca.
Florencia